El hombre detrás del “Party” ochentoso

Posted by: NAHJ-UPR on: March 3, 2009

Poster promocional de "Party Time"

Por Adriana Berríos Pérez

Cuando los jóvenes piensan en la década del 1980, probablemente se imaginan que las cosas eran radicalmente diferentes. Pero hace 20 años, los adolescentes en Puerto Rico también se enchulaban, tenían sus inseguridades, bregaban con las presiones de sus amigos y vivían en medio de una guerra de géneros musicales: la salsa versus el new wave. La película puertorriqueña Party Time capturó la esencia de la vida juvenil “ochentosa”, presentando una cómica historia de amor entre dos chicos de escuela superior.

Party Time estrenó en las salas de cine como una refrescante explosión de humor, ritmo y talento boricua. La película acaparó el apoyo de los adolescentes y se alzó con el Premio del Público en el Festival de Cine Internacional de San Juan. El elenco de artistas noveles que protagoniza el filme ha sido alabado por su tremendo potencial. Pero detrás de todo el fenómeno está el director Juanma Fernández-París, el hombre que ideó este drama peculiar y lo llevó a la pantalla grande.

De su deseo de ver un buen filme puertorriqueño en las salas de cine y de su cariño por el género dirigido a adolescentes, nació el concepto. Fernández-París dijo que quería hacer una propuesta “que fuera inteligente y que tuviera algo positivo que decir sobre nuestra cultura, pero que también fuera entretenida”. Luego de trabajar en el libreto por casi 10 años, el primerizo director finalmente vio su proyecto cinematográfico estrenarse en enero del 2009.

El también crítico de cine del periódico El Nuevo Día por los pasados siete años, comentó que sus dos mayores influencias cinematográficas fueron John Hughes y Cameron Crowe, ambos famosos directores-guionistas de Hollywood. “Hughes tenía la habilidad de capturar esa energía particular de lo que es ser adolescente”, afirmó el director sobre su ídolo. “Y Crowe tiene el toque especial de lograr que todos sus personajes parezcan seres humanos de carne y hueso. Eso parece que es algo simple pero es bien difícil de realizar”. En su opinión, estos elementos lograron que los filmes de ambos directores “trascendieran el contexto cultural de los ochenta”, y por tal razón, Fernández París intentó incorporarlos al máximo en su propia película.

Aún en los días de mayor tensión, el director señaló que lo más que le agradó fue colaborar con el elenco y el equipo de trabajo, quienes hicieron que la experiencia fuera divertida. Su mayor reto fue “lidiar con la burocracia de un filme financiado con dinero del gobierno”. Party Time fue creada con el apoyo del Fondo Cinematográfico de la Corporación de Cine de Puerto Rico, una entidad gubernamental.

“El proceso de trabajar dentro de ese contexto fue difícil y extenso”, comentó. “Aunque la estructura ha mejorado muchísimo, hubo ocasiones en que las reglamentaciones no iban a la par con las necesidades de la producción”. Pero el director está sumamente agradecido de haber podido trabajar en el proyecto con un grupo de jóvenes actores puertorriqueños, entre ellos Rafael Albarrán, Suheil Martin y Roberto Luis Vigoreaux, experiencia que describió como “un sueño” que quiere volver a repetir.